Género y sexo: Desenredo feminista

Copiada de Ciudad Real Digital

¿Qué es el género? ¿Por qué no es lo mismo que sexo? ¿Cuál es el objetivo feminista? 

Tu "género" ( si es que hay algo en nosotros que se pueda llamar así como una especie de identidad) no tiene que coincidir con tu Sexo, básicamente porque no existe un " género" (entendido como identidad)  para cada sexo.  ¿O sí? ¿Qué entendemos en el acervo feminista por "Género"? Y ¿En qué se diferencia de el concepto de "Género" entendido como identidad?  Aquí está el Quid de la confusión. 

Empecemos por el principio. "Hombre" y "mujer" son conceptos que distinguen el " Sexo" de una persona. No su género. 

El género, es un constructo social. ¿Qué quiere decir esto de constructo social? Pues que tiene que ver con ideas generadas socialmente. Con una ideología. Una ideología contra la cual lucha el feminismo. 

Pero, ¿En qué consiste exactamente eso del género, y cuál es esa construcción? 

El género, es la construcción de lo que se ha llamado " feminidad" y " masculinidad". 

El género, es la asociación de un conjunto de rasgos psicológicos y roles sociales a cada uno de los sexos, siendo la feminidad a la mujer lo que la masculinidad al hombre. 

¿Por qué hablamos de "constructo" cultural? 

Porque la forma en que socialmente se ha justificado la opresión de la mujer tiene que ver con unas ideas de género, que han sido construidas precisamente para hacer una distinción entre lo que podían y debían hacer los hombres y principalmente, lo que podían y debían hacer las mujeres. Siendo está distinción, una forma de subordinar a las mujeres, excluirlas, negarles derechos y construir el mundo en base al poder de los hombres. 

La ideología de Género es  lo que comúnmente llamamos "machismo". 

Durante demasiado tiempo y aún en muchos lugares del mundo, a las mujeres las han tratado como personas de segunda categoría. Sometida a muchas y diferentes violencias, sin tener el estatus de persona en pie de igualdad con el hombre. 

En la actualidad, muchas de esas discriminaciones han cambiado, otras aún persisten, pero lo que sin duda aún permanece en las mentes y en los usos y costumbres, son muchos de los roles de género. 

Los roles de género eran, como hemos dicho, una imposición cultural.  Pero esta imposición cultural buscaba además una justificación teórica de la injusticia sexual. Esa justificación teórica era la ideología por la cuál, la injusticia sexual se justificaba a sí misma, teorizando que esas diferencias sociales impuestas especialmente a las mujeres, tenían un origen sexual, natural, biológico.  

Es decir, que si las mujeres, por ejemplo, no estudiaban o no se les permitía,  era porque no eran tan inteligentes como los hombres. Su tarea era otra, por ejemplo cuidar.

 Su destino social era así explicado y justificado  por razones "biológicas" pues al final todos los derechos que se negaban a las mujeres era por ser mujeres. 

A las mujeres se las preparaba en el mundo para servir, y obedecer, y a los hombres para construir el mundo, y dirigirlo, es decir para mandar y ser servidos. 

En esta división sexual de los roles se construye la "feminidad" y la " masculinidad" como una serie de rasgos, y roles, propios o bien del hombre, o bien de la mujer. 

Es a esta construcción, a lo que el feminismo ha llamado GÉNERO.  Y por la cual es una categoría analítica útil para el feminismo. 

En el debate contra las posiciones biologicistas, las que argumentaban de manera machista que la sociedad era así por las diferencias naturales de hombres y mujeres. ( Es decir los roles sexuales injustos eran considerados naturaleza por los machistas).  Frente a ello, las feministas,  luchaban por demostrar que esos roles sociales, NO eran naturales. 

Ahora bien, esto no significa negar que hay diferencias naturales entre el hombre y la mujer.  Que es parte de la acusación que se hace hoy cuando sacas a relucir que existen diferencias biológicas, a las que algunos llaman erróneamente "biologicistas".

Es decir, el debate era sobre aquellas diferencias que habían sido construidas tomándolas como si fueran biológicas. Esa era la perspectiva biologicista.  

A estas diferencias se las llama género. Por tanto el Género no existe. El género es una categoría analítica y social. Lo que ocurre es que todos arrastramos el significado de feminidad y masculinidad porque lo hemos aprendido así, porque a pesar de que se ha avanzado mucho aún existe la manifestación social de esa construcción sociopolítica e ideológica machista. 

Entonces ¿A qué se refieren cuando dicen mi género no se corresponde con mi sexo? ¿Cuál es ese género que es considerado como una identidad? 

El género considerado una identidad, es OTRO concepto de Género, que sin embargo se deriva también de esa construcción de feminidad y masculinidad. 

Repasemos. Feminidad es la construcción que se asocia a la mujer con una serie de rasgos y roles. 

Y lo mismo masculinidad con el hombre. 

¿Qué dice el feminismo de esto? 

Qué no, que las mujeres no son esa identidad de feminidad, ni los hombres tampoco. Qué todos tenemos rasgos de ambos constructos, y que nuestras diferencias son intersubjetivas. Ninguna persona se corresponde al cien por cien con esos estereotipos sexistas. Y que esas diferencias por mucho que se den en grandes grupos de mujeres y hombres algunas de ellas, son diferencias construidas socialmente. 

Por tanto, según el feminismo, NADIE tiene una identidad que se corresponda con su estereotipo sexual. 

Cuando hablamos del género como identidad aludimos a características de la personalidad. Eso quiere decir que hay una parte que nos viene dada, el carácter, y otra que es construida.  Ese carácter, esa personalidad florecen en un entorno más o menos afín en el que desarrollarse. 

Ese carácter  puede ser más o menos acorde a las características asociadas a las construcciones sociales de feminidad y masculinidad. 

Es a esto, lo que están llamando Género, como identidad. 

Sin embargo, el género femenino (feminidad) como ya hemos explicado, no es el sexo femenino (Mujer).

El género (la feminidad y la masculinidad) son construcciones inventadas. No existen. No somos de un género. 

Sin embargo el sexo, sí es real, sí constituye las bases de las diferencias reales entre hombres y mujeres. 

Por eso, el Género como identidad, no tiene sentido. Y tampoco es la razón del machismo. La razón del machismo es el sexo. Y el género es el medio. 

Ahora bien. También es verdad, que ese machismo. Esa construcción sociopolítica, esa invención de los géneros que tanto ha oprimido y lastrado a las mujeres, afecta negativamente y violenta también a los hombres.  Y en mayor medida a aquellos hombres que más se alejan del estereotipo de masculinidad. 

Es por eso que los hombres femeninos también son más castigados que si los comparamos con los hombres masculinos. Pero aproximarse a los rasgos considerados equivocadamente femeninos no los convierte en ningún caso en mujeres así como tampoco convierte a las mujeres en hombres el poseer rasgos denominados equivocadamente masculinos. 

De hecho el feminismo ha servido aunque queda mucho por conseguir, para que muchos de los rasgos que se consideraban masculinos o los roles, y rasgos también femeninos dejen de considerarse como tales y pasen a verse como siempre debieron verse: Neutros.

Y es a este objetivo al que se refiere como

 " abolir el género"

A vueltas con la transexualidad, lo queer y el feminismo

¿Por qué se empieza cuestionando la teoría queer y se acaba cuestionando la transexualidad? 

El foco en las personas transexuales lo ha puesto la maldita teoría queer, que es tan ridícula que al final lo que acaba consiguiendo es que la gente que nunca se había cuestionado la transexualidad, empiece a cuestionarla también. 

En el momento en el que empiezan a proliferar personas del sexo opuesto que quieren ser reconocidas como un sexo al que no pertenecen sin ninguna operación, ni cambio estético ni nada que plantee ninguna duda al respecto de su identidad sexual; en ese momento, aparece la pregunta ¿Qué es lo que hace por ejemplo "mujer" a este hombre? 

Lógicamente hay gente separando unas realidades de otras. Digamos que se le concede más legitimidad a aquellos hombres que pasan por todo un proceso de hormonación, operación, y estética para ser considerados mujeres, que a aquellos que simplemente dicen que son mujeres sin realizar ningún cambio de este tipo. 

Y entonces también con algo de razón alguna gente dice ¿Acaso tienen las personas que operarse y mutilar su cuerpo u hormonarse? ¿No sería mejor que no lo hicieran? 

Y sin embargo esta postura es defendida por aquellos que quieren que una persona sin más criterio que su afirmación, pueda cambiar los papeles de su sexo. 

Y claro, esto como hemos dicho antes se entiende bastante menos que aquellas personas que tienen disforia y hacen esos esfuerzos por ser algo que no son. 

Es decir, al final, la vuelta de tuerca de lo queer, acaba cuestionando algo que estaba bastante asumido en la sociedad y que sin embargo no deja de ser un fenómeno bastante bizarro. 

Al final te acabas preguntando porqué se ha aceptado eso de que las personas "cambiarán" (sí lo pongo entrecomillado porque en realidad no cambian) de sexo, y cómo no se han pensado otro tipo de explicación y abordaje ante este fenómeno social que no implicase la tortura de estas personas. 

¿Qué dice la teoría feminista sobre el fenómeno trans y el género?

En mi opinión, la teoría que más se acerca a comprender y abordar este fenómeno es la teoría feminista del género. Es decir, esa teoría que explicaría esta realidad atendiendo a la opresión social del género entendido éste como la construcción social que divide a los sexos en estereotipos según la cuál los hombres están asociados a unos estereotipos y las mujeres a otros, de manera que se coarta la libertad de la personalidad de ambos. (He de recordar que aunque se coarta a ambos no se hace de manera neutral sino con la opresión principal de las mujeres) . 

Es decir, el fenómeno de la transexualidad se explicaría así de la siguiente forma:

Las personas quieren cambiar de sexo porque aquellas características de su personalidad chocan con la visión sexista de la sociedad mandándoles el mensaje de que su sexo no coincide con la personalidad que manifiestan. 

Esto, sería una explicación social de esa disforia y de ese deseo de ser otro sexo, donde en realidad hay más bien un deseo de ser uno mismo aceptado socialmente. 

Ante esta realidad y ante la propia opresión de las mujeres, el feminismo tiene la misma estrategia, que no es la de pretender que se cambia uno de sexo y así ya coincide con ese estereotipo social, sino que socialmente hay que luchar contra los estereotipos sexistas para el pleno desarrollo de nuestra personalidad en libertad sin pretender que se puede modificar el sexo biológico de ninguna manera ni que se debiera hacer. 

Este enfoque coincide con el planteamiento de qué es completamente innecesario que ninguna persona pase por operaciones u hormonaciones para ser socialmente aceptados, pero también al mismo tiempo considera ridícula la pretensión de ser reconocidos como un sexo que no se tiene y sin embargo lejos de estigmatizar o patologizar la libre manifestación de nuestra personalidad, aboga por ella, y apuesta por abolir el género, es decir abolir los estereotipos que socialmente imponen que para manifestarse socialmente x se debe de pertenecer a un sexo. Por ejemplo que parA pintarse las uñas hay que ser una mujer o para comandar un ejército un hombre.

Es decir, mientras que la transexualidad asume la contradicción social y no la cuestiona sino que cambia el cuerpo y o la identidad sexual para adaptarse a la sociedad. ( Es aquí el individuo el que está mal, el que necesita una TRANS formación para adaptarse al encajonado del género) En el feminismo, es la sociedad sexista lo que está mal y debe ser transformada liberando a hombres y mujeres del sexismo.